La aparición de experiencias de violencia política por diversos grupos políticos durante la dictadura franquista y la Transición no constituye un fenómeno aislado, ni en el contexto europeo, ni en el internacional. Las influencias del convulso contexto de la segunda mitad de siglo XX, abrió debates sobre el uso de la violencia política, basado en diversas experiencias, producto de los conflictos que se van a producir en la competencia de las potencias vencedoras de la Segunda Guerra Mundial. La Descolonización y las guerras coloniales el fenómeno guerrillero en America Latina, así como las experiencias de la nueva izquierda radical que se va a desarrollar desde diferentes culturas políticas son algunos de los elementos centrales van a influir en los grupos de oposición al franquismo. Diversas culturas políticas radicales van a poner en marcha grupos armados en Europa. Desde los «pequeños nacionalismos Europeos», hasta las guerrillas urbanas izquierdistas, sumado al activismo violento de las nuevas generaciones de extrema derecha que van a suponer la otra cara de la moneda del sesentayochismo, el fenómeno de la violencia política va a suponer uno de los fundamentales desafíos durante el último tercio del s. XX.